En el artículo de hoy os escribiré sobre diez consejos para poder invertir en bolsa con éxito. Estos constituyen sólo el inicio para empezar, pienso que no hay que subestimar el poder de unas cuantas ideas simples.
Consejo 1: Entender en que se está invirtiendo
Suena trillado, pero debes entender en qué estás invirtiendo tu dinero. Si te interesa una acción concreta y no quieres fiarte únicamente de tu intuición, deberías, por ejemplo, echar un vistazo al informe anual de la empresa, a las últimas cifras trimestrales, a los informes de los analistas y a las previsiones económicas. Si entiendes el modelo de negocio de la empresa deberias poder explicarlo con muy pocas palabras. Escribí hace unos meses un artículo de cómo analizar una empresa por sus fundamentales, quizás pueda ayudarte.
O tal vez prefieres recurrir a la experiencia de los profesionales e invertir en un fondo de renta variable en el que uno o varios gestores se encargan de los análisis. También en este caso debes informarte: ¿La orientación del fondo se ajusta a tu perfil personal de riesgo-rentabilidad? ¿Qué costes fijos tienes el fondo? Como ves, para invertir tendrás que poner algo de interés y parte de tu tiempo.
Consejo 2: No pongas todos los huevos en la misma cesta
¿Has investigado y tienes en mente una acción concreta? Es un buen comienzo. Pero tal vez estas pensando en varias acciones y no puedes decidirte. No tienes que hacerlo necesariamente. Porque una vez que empieces con un fondo de inversión, tu dinero estará repartido entre cientos de acciones diferentes. Así se minimiza el riesgo si una empresa tiene malos resultados o incluso quiebra.
Si quieres invertir en acciones, pero quieres asumir un poco menos de riesgo, los llamados fondos mixtos también son interesantes. Estos invierten el dinero no sólo en acciones, sino también en valores que devengan intereses. Dependiendo de cómo los gestores del fondo evalúen los mercados, la proporción de acciones también puede reducirse en ocasiones.
De este modo, habrás repartido tu dinero dos veces: distribuyes tu dinero entre la renta variable y la renta fija, y dentro de estas dos clases de activos, entre muchos valores individuales diferentes.
Consejo 3: Invierte sólo el capital disponible
Sólo debes invertir en los mercados el capital que no tengas previsto emplear en el el corto plazo. Si sabes que vas a necesitar el dinero en los próximos cinco años para la devolución de un préstamo personal o alguna compra, se aplica lo siguiente: no lo inviertas. Porque hay que evitar un momento fijo de venta, que podría ser especialmente desfavorable en ese momento.
Por ejemplo, si sabes que vas a comprar un inmueble en dos años y a pesar del riesgo decides invertir el dinero en renta variable. Justo en el momento en que vas a firmar ante el notario, la bolsa entra en una fase bajista. El resultado: tendrías que vender con pérdidas.
Mi recomendación sería invertir ese dinero en una cuentas remunerada al 1%, como la de Orangebank. No es una gran rentabilidad, pero lo menos le ganas un rendimiento a tu dinero.
Consejo 4: Se muy paciente con tu inversión
Quieres comprar un coche nuevo, pero te falta todavia dinero para comprarlo y no quieres financiarlo. ¿Estas pensando en invertir el dinero en bolsa y conseguir el dinero que te falta rápidamente? ¡Por favor, no lo hagas! A la hora de invertir hay que tener paciencia: es mejor no apostar por el euro rápido. Una buena idea, en cambio, es ahorrar regularmente con un plan de ahorro en fondos, a través de indexados o ETFs, por ejemplo.
Si buscas ganancias rápidas, inevitablemente tendrá que optar por una inversión de alto riesgo. Esto puede funcionar bien, pero con demasiada frecuencia los principiantes, en particular, caen en una trampa. Porque con una cartera desequilibrada, podrías acabar sin nada.
Si por el contrario, tienes paciencia e inviertes con previsión, tendrás muchas más posibilidades de realizar la mejor inversión posible. Con el tiempo, el riesgo de perder dinero con las acciones disminuye considerablemente. Quien invirtió hace 5 años en un fondo que replica el MSCI World, habría alcanzado una rentabilidad entorno al 82%. No obstante, los fondos de inversión están sujetos a las fluctuaciones de los precios como se puede apreciar en el gráfico que aparece a continuación.

Consejo 5: No dejes que las pérdidas te pongan nervioso
Por supuesto, uno entra en la inversión de acciones con la expectativa de conseguir la mejor rentabilidad posible. Pero la bolsa siempre está en movimiento y tu cartera también puede presentar pérdidas en un momento dado.
Las fluctuaciones de las cotizaciones son bastante normales y ocurren todo el tiempo. Esto no es mala suerte, sino por el contrario, una señal de que los mercados de valores funcionan y la oferta y la demanda cambian. Prepárate para el hecho de que puedan producirse correcciones y no caigas en el pánico. Reacciona con la cabeza fría, muchas veces los más difícil con las inversiones es no hacer nada.
En el caso de las acciones, puedes fijarte un límite de «stop-loss» para estar seguro, es decir, un valor por encima del cual quieras deshacerte de tu inversión en cualquier caso. Por otro lado, las correcciones de precios también pueden ser el momento exacto para comprar a un precio favorable.
Consejo 6: Mantener el escepticismo ante los consejos sobre acciones
Hoy en día es fácil escuchar o leer «consejos infalibles» de supuestos gurús de la bolsa. Prometen rentabilidades superiores al 10% como mínimo. Si ves alguno de ellos mi consejo es que tengas cuidado. Existen muchos supuestos expertos en el ámbito de la inversión que te harán promesas, pero siempre hay que preguntarse qué interés tienen en contarte toda esa información. Y porqué, si supuestamente son tan buenos invirtiendo, siguen trabajando.
Por lo tanto, es mejor acercarse a todos los consejos demasiado tentadores con un sano escepticismo.
Consejo 7: No especules, invierte
Comprar, vender, comprar, vender: así es como algunos se imaginan la inversión en valores. Normalmente, esto no tiene mucho que ver con la realidad. El hecho de comprar una acción y volver a venderla días o semanas después es, con suerte, la excepción.
Porque si se comercia mucho y rápido, se produce ante todo una cosa: los costes. Al comprar y vender, se incurre en comisiones que primero deben ser recuperadas por el rendimiento de la acción o de un fondo.
Si se invierte de forma estructurada y amplia, no es necesario entrar y salir de las acciones todo el tiempo.
Consejo 8: Utiliza el efecto del interés compuesto
Deja que tu dinero trabaje por ti. Esta frase es la que mejor describe lo que significa el interés compuesto para tu inversión. Es la palanca que te permite aprovechar todo su potencial.
La idea que subyace es relativamente sencilla: se reinvierten los beneficios o los intereses para generar más ingresos. En otras palabras, se suman los beneficios al capital que se ha invertido para tener la posibilidad de obtener mayores beneficios. En el caso de los fondos, la reinversión suele producirse de forma automática, por lo que no tienes que hacer nada.
El interés compuesto es uno de los mecanismos más importantes de creación de riqueza. Albert Einstein respondió supuestamente a la pregunta de cuál era la fuerza más fuerte del universo: «¡Es el interés compuesto!». Te compensa sobre todo a largo plazo. Así que aprovecha este efecto para poder aumentar tu riqueza de forma decisiva.
Consejo 9: Revisa tu inversión regularmente
Debes gestionar tu inversión con mano firme. Incluso si se mantiene un seguimiento razonablemente estrecho del mercado financiero, las señales pueden cambiar. No hay que dormirse ante estos acontecimientos. Si bien es cierto que muchas veces lo mejor es no hacer nada, si cambian lo datos fundamentales de una empresa o ocurre algo que no estaba previsto tendrás que revisar tu carteras de valores en detalle.
Es mejor que hables de tu cartera con su asesor de inversiones de forma periódica -preferiblemente al menos una vez al año- y que haga ajustes si es necesario. O la revises tu mismo.
En este sentido recomiendo la herramienta de monitoreo y análisis de Portfolio Performance. Puedes leer información detallada sobre ella en el apartado de herramientas del blog.
Consejo 10: No esperes más para empezar
¿Tiene la sensación de que te queda mucho por aprender o ves el mundo financiero muy complicado y por eso no te atreves a invertir en bolsa? Anímate porque no hace falta ser un profesional de la bolsa para empezar a invertir. Lo más importante es contar con el sentido común.
El mejor momento para empezar a invertir es hoy. Toma acción, empieza por leerte algún libro, recomiendo algunos en la sección biblioteca.
Cada día que pasa sin haber invertido es un día sin posibilidad de obtener rentabilidad de tus ahorros. Informate y planifica un poco tu futuro financiero antes de que quizás sea demasiado tarde.
Apréndelo todo sobre la volatilidad.